Psicopatología y psicoanálisis.
Psicopatología y psicoanálisis.[1]
Buenos días tengan todos ustedes,
estamos aquí y lo que nos reúne es comentar algo respecto a la psicopatología,
me gustaría empezar mostrando una postura personal que se me impone para pensar
este tema, digo que se me impone porque muchas veces no es posible sostenerla o
es muy difícil hacerlo, en las instituciones donde uno trabaja, dedicadas
generalmente a modificar síntomas – eliminarlos creen algunos que eso es
posible- y dedicadas a fines normativos y adaptativos de los pacientes. Esa es
la característica de nuestra época que ustedes como alumnos (futuros
psicólogos) y nosotros como maestros debemos tener en claro. Decía san quien
sabe quién “quien no pueda unir a su horizonte la subjetividad de su época, que
renuncie!”. Siempre que alguien comenta que en la época actual el psicoanálisis
es difícil practicarlo, me causa gracia y algo de misericordia ese comentario,
porque pienso en la época de Freud, las cosas tampoco eran sencillas por
aquellos años, a él le toco vivir en medio de un conflicto bélico, la segunda
guerra mundial y encima era judío ustedes saben lo que eso implicaba, toda una persecución
nazi que obligo a Freud abandonar Viena y trasladarse a Londres con ayuda de un
amigo suyo. Ya he contado la anécdota en clase sobre la nota que le dejo a la
GESTAPO cuando lo fueron a buscar en su casa, Freud les escribe algo agradeciendo
las atenciones jajá. Entonces creo personalmente que las resistencias al
psicoanálisis se actualizan y si bien son diferentes los modos en que se
presentan, al igual que son diferentes los síntomas que hoy se nos presentan en
la clínica, hay cosas que tenemos que replantearnos y otras que debemos ubicar
bajo el contexto actual, por ejemplo poder hacer una diferencia entre
subjetividad, contexto histórico y psiquismo, es decir hay conceptos psicoanalíticos
que no estoy dispuesto a negociar, me refiero a conceptos como inconsciente, la
represión, la conciencia y la resistencia, piezas de museo que el psicoanálisis
nos ha legado para poder entender el aparato psíquico con el que se supone los
psicólogos debemos atender, entonces del lado de los pacientes y de las
instituciones se nos presentan estas características, estando en la época de la
normalidad y la felicidad, dos significantes amos de estos tiempos y del lado
de los psi.. Psicólogos psicoanalistas psicoterapeutas psicomagos se nos impone
como posicionarse frente a estos problemas, los que han llevado clases conmigo sabrán
mi postura es la del psicoanálisis y personalmente no creo que como piensan
muchos, la postura del psicólogo debería ser una mezcla de todo un poco, pero
en fin ese es tema para otra conferencia.
Continuando con la ponencia y
habiendo aclarado mi identificación con el psicoanálisis quisiera a partir de
ahí retomar el tema de la psicopatología, en primera a veces prefiero llamarla
yo locura, la locura es algo que se ha tratado de erradicar del ser humano,
muchas veces vista como una enfermedad y a la mente como un órgano, esto es
también una de las ideas que trato de transmitirles en clase, la mente no es un
órgano y la locura no es una enfermedad, los que han sido mis alumnos lo saben,
comúnmente el estudio de la locura se ha edificado en dos grandes campos, es
decir locura versus cordura, enfermedad versus sanidad o normalidad versus
anormalidad, esa concepción intento no destruirla pero si analizarla, la locura
y la sinrazón es algo que está presente en lo más íntimo de cada ser humano, si
he de decir algo positivo respecto al dsm y sus quien sabe cuántas versiones,
es que ese manual es algo descriptivo, hace un momento les hablaba sobre no
destruir esa frontera por que puede ser útil si acaso para la descripción de
síntomas, pero no para generalizar causas, en el psicoanálisis no se trabaja a
partir del síntoma, porque se sabe que el síntoma es una formación de
compromiso entre el impulso y la defensa, es una formación sustitutiva de un
conflicto interno, si ustedes quieren verlo como lo que está detrás de eso, está
bien que por ahora así se lo imaginen, pero conforme vayamos avanzando pensar
que el conflicto es algo que está detrás o debajo, es algo que pronto nos dará
dificultades para pensar, por ejemplo creer que el inconsciente es esa parte
del iceberg que no se ve a simple vista, es también erróneo, porque lo
inconsciente está a flor de piel. En el lapsus en el síntoma, en el
enamoramiento, en lo que siempre me imagino que va pasar, en lo que supongo de
las intenciones del otro, en lo que sueño. Bueno estas son preguntas más
sofisticadas y no me propongo llegar a tanto, sobre todo a conciencia que yo
también estoy actualmente en un proceso de formación psicoanalítica, pero creo
si poderles transmitir la introducción a la locura o la psicopatología desde el
psicoanálisis. Se darán cuenta entonces que esta es otra de las razones por las
que me opongo a que la locura sea pensada como ustedes los normales y ellos los
locos, ustedes los sanos y ellos los enfermos ¿o cambiamos bandos? A verdad jajá
lo que trato de decirles es la idea del profesor Álvarez, jefe del departamento
de psicopatología en Valladolid España, él dice: podemos pensar la locura como
un litoral, yo la pienso como el mar y la tierra, la arena, los que hayan
visitado el mar o por lo menos lo hayan visto por televisión se darán cuenta
como llegan las olas a tierra, llega el agua y se regresa, moja la arena y se
retira, bueno este ida y vuelta de las olas
es lo que pasa con el sentido y el sin sentido, la locura y la cordura,
la conciencia y la inconsciencia, cuando soñamos estamos locos, es decir cuando
soñamos se cancela el contacto con el mundo exterior, el sueño es un proceso
donde el yo y la conciencia se diluyen, la energía se retrae hacia sí mismo y
eso hace posible el fenómeno del sueño y la aparición de contenidos
inconscientes, desde esta perspectiva si tomamos enserio a lo inconsciente,
como algo que forma parte del aparato psíquico, la idea de dividir locura y
cordura, sanos y enfermos, se nos cae, porque a partir del descubrimiento del
inconsciente se reordena la psicopatología y la locura en nosotros mismos, son
procesos que se viven como dice el profesor Freud, en la vida cotidiana,
psicopatología de la vida cotidiana, también decía que si todos actuáramos como
actuamos en nuestros sueños, seriamos vistos como locos y de echo lo seriamos,
he aquí ya un hallazgo, la posibilidad que tiene la conciencia de diluirse y
reintegrarse, esto es algo que no está en muchos casos o algo que es muy
cambiante, por ejemplo que un niño juegue a que es súper man, y pueda dejar de
jugar y volver a ser fulanito, es muy diferente a un niño que no renuncie a eso
y nunca responda a su nombre, o también muy diferente a que se crea súper man,
crea que puede volar y se aviente de las escaleras, si bien es cierto esos
ejemplos todos tienen su locura, no es la misma. ¿Me explico? O el adolescente
que se crea Messi, juegue futbol, se llegue a comprar la camisa de el barsa o
de argentina, se ponga el 10 -¿Messi tiene el 10?- llene su cuarto de posters
de Messi y al ratito quiera ser como el cantante idolatrado por las muchachas y
se llegue a cortar el cabello o a pintárselo, en ese momento no quiere ser como
el papá, porque hay nuevos ídolos, es más llega aborrecerlo, a diferencia del
niño, que si es el papá su ídolo, y les presume a sus amiguitos que su padre es
el mejor despachador de gasolina que hay en Santa ¿ven la diferencia? Lo que
juzgaríamos como un proceso patológico en la infancia, ya no lo consideramos en
la adolescencia, además de que esta característica de la conciencia que yo
llamaría refractaria, movediza, chiclosa como dice el maestro David Flores esta en intima relación con lo inconsciente,
no sé si el tiempo me alcance pero quisiera ahora exponerles un caso clínico
con el que estoy trabajando, un caso clínico que yo considero se trata de una
psicosis fuera de crisis, no hay alucinaciones no hay delirios, si hay ideas
con las que el sujeto se obsesiona, aquí otra diferencia pero ahora entre el
psicoanálisis y la psiquiatría. Para los psiquiatras generalmente solo si hay
delirios y alucinaciones hay psicosis también para el DSM, para mí no porque no
lo enfoco únicamente desde el lado de los síntomas que presenta o no presenta
el sujeto, este muchacho no ha elaborado un delirio, creo que es alguien
endeble y con un yo bastante cambiante, ahorita les explico porque digo esto, volviendo
a matizar las diferencias ahora quisiera hablarles de la paranoia, tomaría
también prestada una frase del maestro Flores él dice: a los paranoicos también
los persiguen. Yo lo entiendo así:
generalmente se cree que si un sujeto dice que lo persiguen y no hay nadie
haciéndolo, decimos ah! se trata de una idea irracional y pensamos que estamos
frente a un paranoico, pero no, y a la inversa, si nos damos cuenta que
efectivamente hay alguien siguiéndolo, la esposa, la novia, el jefe del
trabajo, decimos ha entonces no es paranoia, pero no muchachos, no porque si
haya alguien o no lo haya deja de ser paranoico. ¿Me explico? Es más a algunos
les pagan por ser buenos yoes paranoicos jajá. Entonces les he presentado de
manera muy rápida varios yoes, uno infantil, otro adolescente, uno psicótico y
otro paranoide, y de cómo la conciencia es altamente lábil y movediza.
Ahora bien, retomando el caso
clínico del que les quiero hablar, es un muchacho de aproximadamente 22 años
que durante gran parte de su vida se le ha considerado tener un retraso mental,
no hay lesiones de nacimiento, la madre comenta un desarrollo desfasado, tardo
en hablar, caminar y verla a los ojos si mal no recuerdo. Del lado del padre
tuvo una hermana diagnosticada con esquizofrenia, ustedes podrán pensar que se
trata entonces de algo congénito, no estoy seguro, pero no quiero abordar el
caso desde la parte orgánica, ahora bien, lo que al padre le conflictua de su
hijo, por lo que veo a la madre no, es la fijeza de ciertas ideas obsesivas que
él tiene, por ejemplo al inicio de las sesiones el insistía en que es chofer de
la ruta 209, él se gastaba su dinero en viajes en el 209, se subía y se daba
toda la vuelta en el camión, se la pasaba en constante circulación, errante,
digo errante porque nunca llegaba a un destino, una errancia de la que nos
habla Contardo Caligaris en su libro “clínica diferencial de las psicosis” no
de error, si no de no encontrar una articulación, más que un destino, un
propósito, como el neurótico que dice hacer las cosas por algo aunque sus
propósitos estén definidos inconscientemente, lo que él le importaba era ser un
chofer del 209 y nada más, se vestía incluso del color de las camisas que usan
los choferes y decía que se iba a trabajar, algo importante es que el padre fue
chofer de esa ruta, el trabajo ahí, llevaba a su hijo a que lo acompañara
durante su trabajo. Otra cosa que comentaba mi paciente es inscribirse en la
facultad de comunicaciones, quiere ser también locutor de radio, la hermana
estudio en esa facultad, entonces él va a pedir informes y aunque sabe que no
tiene acabada la secundaria, insiste en que se convertirá en comunicólogo para
ser locutor de radio, algo importante, cuando le pregunto por qué quiere ser
locutor de radio, me dice que una vez el habló por micrófono en una lotería, y
que escucho su voz la cual le desagrado, él quiere convertirse en locutor
entonces para cambiar su voz por otra. Este muchacho mantiene una relación conflictiva
con sus padres, me dijo que se peleó con su padre porque él le dijo que ojala
no hubiera sido su hijo, al día siguiente me lo platica y me dice que ahora
quiere ser trabajador del Starbucks, la
idea le surgió por que fue al súper con su padre, compraron café a su padre le
gusta tomar café y por eso quiere trabajar en Starbucks, no sé si se fijen pero
esta por un lado este intento de identificación con el padre, intento que no
pasa por lo simbólico, sino por la realidad externa, el no enuncia admiración
al padre, por el contrario, repudio, cuando le digo si su intención es trabajar
ahí para tener el cariño de él, se queda serio. Ahí podemos trabajar algo de la
articulación entre su realidad, lo que hace y un propósito. Con su madre
también ocurrió algo. Ella le quiere quitar su tarjeta para subirse en los
camiones, porque no lo controla me dice la madre, entonces se la esconde, mi
paciente le dice: mira mama me la voy a meter dentro del pantalón, a si vas a
tener que meterme la mano y tengo orines y te vas a manchar. Osea por un lado está
actuando a un nivel de realidad exterior su Edipo y por el otro es un yo que
cambia bastante de forma, ser chofer, ser trabajador de Starbucks, ser locutor.
Es el repudio y la proyección de su Edipo en la realidad exterior, repudio que
no puede inscribirse en su subjetividad ¿me explico? Es como si internamente no
pudiera inscribir esta novela edipica y tuviera que actuarse, me parece que
este es el mecanismo primordial de las psicosis, la desmentida o como dice Lacan
la forclusión. ¿Hacia dónde apuntaría el tratamiento con este muchacho? La
manera de proceder que los padres me piden es “aterrícelo” no se trata de eso, se trata de que el
muchacho pueda introyectar sus objetos parentales, pero esta solo proyectándolos,
ahora este proceso se complica también por las cualidades yoicas, este
antropomorfismo, que significa tomar las cualidades de los objetos y ser como
las cosas o los demás. Bueno son algunas pinceladas que intento transmitirles
para enfocar el campo de la psicopatología más que el de el desarrollo de una
cura, seguramente tendrán preguntas, les parece que dialoguemos, dije muchas
cosas, a ver los escucho…
[1]Ponencia presentada a estudiantes de psicología
La dinamica que indicas en el escrito nos dice que se maneja un lenguaje muy diferente entre los miembros, hay una falla de comuniacion, es correcto el Edipo se actua en ambas partes, la madre sigue jugando ese papel para el paciente sigue habiendo una castracion, "aterrizarlo" los padres entonces estan diciendo ellos mismos sin darse cuenta tal vez que su hijo esta "loco" , dice que no tiene ni la secundaria, aunque las dificultades de desarrollo fueron mas tempranas, parece que si hubo un intento y una atencion a que tuviera un desarrollo normal, si algo aprendi en las clases de eduacion especial es que los padres tienen que aprender a ajustar sus exigencias de acuerdo a la situacion en la que se encuentre, el pasado ya paso pero ahora lo importante seria sacar eso, tal vez no se pudo decir en ese entonces.
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